#hoysupe que hace 137 años se descubrió el transmisor de la fiebre amarilla.

¿Sabes cuál es el animal más peligroso del mundo? No, no es ni el león, ni el tigre. Ah y tampoco el tiburón. Es un animal muuuy pequeño, casi insignificante, ah, pero cómo molesta…así es, el mosquito. ¿Por qué te cuento esto?

El mosquito

El mosquito

Hace muchos años, pero muchos años, comenzaron las epidemias de la famosa “Fiebre amarilla”. Una enfermedad horrible, que comenzó en África oriental o central, probablemente por un primate. Pero cuando empezó el tráfico de esclavos hacia América Central, la epidemia viajó con los esclavos, matando muchísima gente.

Esto ocasionó muchísimos problemas. Por ejemplo: la revolución haitiana se ganó en gran parte porque la epidemia acabó con más de la mitad de los soldados franceses. ¡Imagínate perder una guerra por culpa de una enfermedad! Qué frustrante, ¿no?

Fiebre amarilla

Fiebre amarilla

El problema era que no sabíamos cuál era el transmisor de esta enfermedad. Cuando me enteré de esta enfermedad, me involucré lo más que pude, ya que como médico y científico me interesó mucho. Estudié todo lo que pude de esta enfermedad, pero no daba con el “transporte” de la epidemia. Era muy frustrante y estaba muy preocupado.

Una noche, mientras estaba haciendo mis rezos, empecé a escuchar un zumbido que se alejaba y se acercaba. ¡Argh! ¡Necesitaba concentrarme, y ese molestoso insecto no me dejaba en paz! Cuando de repente, detuve los rezos. ¡El mosquito! ¿¡Cómo no lo había pensado!? Era el perfecto transporte de una enfermedad. Así que comencé a estudiar a este animal. Hasta que di con el Aedes aegypti. Llevé mi teoría a Washington, pero al principio no la aceptaron, así que, en junio de 1881, me regresé a Cuba, para hacer los experimentos necesarios. Así descubrí cómo hacer un suero para vacunar a las personas, y prevenir que la enfermedad los matara.

Carlos Finlay

Carlos Finlay

El 14 de agosto de 1881, llevé las muestras y la investigación a la Real Academia de Ciencias Físicas y Naturales de La Habana y comenzó la distribución del suero, ¡y fue todo un éxito!

Recuerda tomar precauciones en cuanto a los mosquitos: no dejar agua en contenedores, siempre ponerte repelente cuando salgas a la naturaleza, usar los mosquiteros en tus ventanas, puertas, etc., ¡Porque este pequeñín es más peligroso de lo que parece!
– Carlos Finlay