#hoysupe del cumpleaños de Vivaldi.

Está por asomarse la primavera mientras tú y yo y nuestros pensamientos esperan inquietos su llegada. Inevitable es extrañarla y desear que pronta irrumpa en nuestros paisajes y vidas.

Hoy es especial porque en un día homónimo de 1678 la historia me vio nacer con el nombre Antonio Lucio Vivaldi, en la bella Venecia.

Vivaldi

Vivaldi

Y no es casualidad que haya sido en el preludio de una primavera barroca.

Años más tarde tuve la osadía de articular musicalmente la colorida estación en una obra que seguramente has disfrutado.

Sorprendí a la historia ya que mi destino estaba en el sacerdocio, pero la música fue mas fuerte: el violín mi primer aliado y más de 400 conciertos parte de mi legado.

Mis contemporáneos no estaban listos para valorar mis creaciones. Después de algunos intentos fallidos tuve que dejar Italia para sufrir mis últimos días en Viena y luego esperar algunos siglos para que mis ideas fueran redescubiertas y exaltadas.

Pero así de impredecible es la historia, que a todos da la oportunidad de encontrar contemporáneos en diferentes épocas y compatriotas en todo el orbe.

Me despido pero aprovecho para compartirte este soneto, sospechado de mi autoría, para que lo leas mientras escuchas mi capolavoro “La Primavera” y te disfrutes envuelto en esta eterna alegría de la vida.

 

LA PRIMAVERA

Llegó la primavera
la saludan las aves con su alegre canto,
y las fuentes al son del blanco viento
con dulce murmurar fluyen en tanto.

El aire cubren con su negro manto
truenos, rayos, heraldos de su adviento,
y acallándolos luego, aves sin cuento
regresan a su canto grato y melodioso.

Y así sobre el florido ameno prado
al primer murmuro de hojas y plantas
duerme el pastor con su fiel perro al lado.

De pastoral zampoña al son chispeante
danzan las ninfas y el pastor bajo el techo amado
de primavera al irrumpir brillante.